ALMACENAMIENTO DE LA LECHE MATERNA
La leche materna tiene propiedades antibacterianas, que permiten su almacenamiento por periodos prolongados de tiempo, en determinadas condiciones.
- Calostro:a temperatura ambiente entre 27 - 32ºC, 12 horas.
- Leche madura a temperatura ambiente:
b) De 15 a 22ºC hasta 12 horas.
c) De 22 a 30ºC 4 horas.
- Leche madura refrigerada entre 0 y 4ºC hasta 8 dias.
- Leche madura congelada:
2.En un congelador de nevera combi ( dos puertas), 3 meses.
3.En un congelador independiente tipo arcón 5 meses.
TIPOS DE ENVASES:
La leche materna extraída, debe almacenarse en envases destinados para uso alimentario.
Los mejores envases para la congelación son los de cristal por ser menos porosos ofrecen la mejor protección.
La segunda opción, son los envases de plástico duro transparente (policarbonato).
En tercer lugar los de plástico duro translúcido(polipropileno).
Otra opción son las bolsas de plástico especialmente comercializadas para almacenar leche materna. Es preferible no utilizar otras bolsas más finas, que pueden romperse o contaminarse más facilmente.
No hay evidencias claras sobre los beneficios de otro tipo de envases para almacenar leche fresca. La madre puede utilizar de entre los mencionados el más adecuado a sus necesidades.
LIMPIEZA DE LOS ENVASES:
Es conveniente limpiar con agua caliente y jabón, aclarar bien y secar antes de usar. Puede utilizarse el lavavajillas.
DESCONGELACIÓN DE LA LECHE:
La leche se puede descongelar bajo el chorro del agua fría primero e ir aumentando la temperatura del agua del grifo poco a poco.
Se puede sumergir el recipiente de la leche otro recipiente con agua caliente, pero no calentar directamente al fuego ni al microondas.
La leche descongelada se puede guardar en nevera 24 horas, pero no se puede volver a congelar.
La leche debe agitarse antes de probar su temperatura en la muñeca.
OLOR A RANCIO:
Algunas madres, pueden notar que su leche, tiene olor a rancio una vez descongelada. Este se debe a la acción de la lipasa.
Para prevenirlo, se puede escaldar la leche justo después de la extracción, dejar enfriar y congelar.
Escaldar: calentar la leche hasta observar que se empieza a formar espuma por los bordes del recipiente.
Una vez que tiene olor a rancio no se puede hacer nada por eliminarlo. No hay evidencias que esa leche sea perjudicial para el bebé.
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